¿QUÉ ES LA HIPERTENSIÓN PULMONAR? ¿ES LO MISMO QUE LA HIPERTENSIÓN ARTERIAL?
Para entender qué es la
Hipertensión Pulmonar (HP) debemos tomar en cuenta que nuestro sistema tiene
dos tipos de circulación sanguínea: La mayor o sistémica trasporta la sangre
desde el corazón al resto del cuerpo; y la menor o pulmonar va del corazón a
los pulmones y viceversa. En la mayor se manifiesta la enfermedad de hipertensión
arterial y se controla en los brazos; mientras que en la menor se produce la
hipertensión pulmonar y su valor se mide, principalmente, en un cateterismo
cardiaco, aunque un ecocardiograma doppler puede brindar una aproximación
interesante, explica el cardiólogo Martín Salazar de la Clínica Ricardo Palma.
Las causas de HP son múltiples y
se agrupan en 5 categorías: la más frecuente es la falla cardiaca del lado
izquierdo del corazón (enfermedad de las válvulas, dilatación del corazón por
infartos, infecciones, etc.). También se produce por una marcada destrucción pulmonar
(tuberculosis), enfisema por tabaquismo, tromboembolia pulmonar recurrente,
enfermedades del tejido conectivo (esclerodermia, lupus, etc.), cardiopatías
congénitas, secundarias a medicamentos y un grupo sin causa aparente a la que
llamados idiopática.
Mucho cuidado
La HP al igual que la presión
alta tiene un largo periodo asintomático. Cuando es moderada o severa produce
una sensación de falta de aire al realizar actividades cotidianas como caminar,
bañarse o vestirse. En formas más avanzadas puede generar dolor en el pecho e
hinchazón en las piernas; y en cuadros graves, coloración violácea en dedos y
labios (cianosis).
En cuanto al tratamiento de la
enfermedad, la opción más importante es corregir la causa que lo provoca. Por
ejemplo, operar la válvula del corazón que la desencadena, si es el origen del
problema. Mientras que los tratamientos específicos se sugieren una vez
realizado el cateterismo a fin de prescribir el medicamento más adecuado para
el paciente. Cabe indicar que la HP es crónica y no tiene cura, solo se retrasa
su progresión.
Su complicación más frecuente es
la insuficiencia cardiaca del lado derecho del corazón, lo que produce
agitación, hinchazón de piernas, hinchazón del hígado (puede llegar a
cirrosis), desnutrición, dependencia de oxígeno y marcada reducción de la
expectativa de vida. También produce arritmias y muerte súbita.
Por ello, es muy importante un
diagnóstico temprano para corregir la causa. Además, un tratamiento
multidisciplinario temprano ralentiza el desarrollo de la enfermedad hacia
formas severas que son muy sintomáticas e invalidantes.