Es
muy importante que recordemos lo importante que es la higiene bucal y de qué
manera podemos garantizar que nuestros dientes se encuentren en perfectas
condiciones. Ya que hoy en día existen herramientas muy útiles para eliminar la
suciedad y acceder a aquellos lugares difíciles, a los cuales, el cepillo de
dientes no llega. Además, recordemos lo importante que es la higiene bucal y de
qué manera podemos garantizar que nuestros dientes se encuentren en perfectas
condiciones sobre todo en el verano.
Es
por eso que el doctor José Pérez Yacer, nos trae sus mejores consejos para
mantener una sonrisa perfecta en este verano.
1. Acude
al dentista antes de salir de vacaciones
Con
el fin de no notar molestias o sorpresas desagradables durante las vacaciones,
es recomendable acudir previamente a nuestro especialista para someternos a una
revisión. Así conoceremos si nuestra salud bucal es la adecuada y las
precauciones concretas que debemos seguir en nuestro caso particular.
2.
No descuides la higiene bucal durante algunos viajes
Se
ha vuelto costumbre, pero en el verano solemos estar más tiempo fuera de casa, motivo
por el cual la mayoría suele descuidar el cepillado diario. Por eso, si vamos a
pasar todo el día en la playa o haciendo turismo, es importante que llevemos a
mano un kit de aseo que incluya, un cepillo de dientes pequeño, una crema
bucal, un hilo dental y un enjuague.
3. Evitar
consumir cosas heladas
Consumir
cosas heladas teniendo piezas dentales en mal estado puede ser un peligro para
la misma salud, ya que puede generar inflamaciones en caso se presente
hipersensibilidad.
4. Cuidado
con el cloro de las piscinas
Las
aguas tratadas con productos químicos, como el cloro, pueden perjudicar el
estado de nuestros dientes y acabar provocando pequeñas manchas en los mismos.
Debido a que contienen un PH superior al de la saliva, las proteínas salivales
se descomponen más rápidamente y pueden acabar formando un sarro marrón, sobre
todo, en la parte frontal de la dentadura.
5.
Evitar las gaseosas
Las
bebidas o refrescos muy azucarados pueden perjudicar el nivel de agua interno y
contribuir con la aparición de las caries. Puesto que el azúcar es el
ingrediente que causa más daño en la dentadura, pues su consumo en exceso
oscurece el esmalte de los dientes y acelera la aparición de caries.